Cuando el silencio atronaba y el gobierno argentino había logrado un clima de adhesión y nacionalismo cuasi malvinero frente al COVID, algo rompió el silencio y comenzó la grieta por donde el disenso y las preguntas comenzaron a filtrarse. Como ocurrió repetidamente en la historia argentina, cuanto mayor es el exitismo peor son los resultados y aún más lejos está la realidad de aquello que se pretende aparentar.
La carta pública firmada por más de 300 personas, intelectuales, investigadores académicos y universitarios, sonó en el silencio reinante y su impacto entro en medios de comunicación, la política y el debate en redes fue impactante. La infectadura vino a ponerle nombre y palabra a lo que muchos pensaban pero evitaban hablar. Las dudas y la desconfianza de depositar la vida en manos de un gobierno que con el tiempo mostró toda su ineficiencia y perversión.
Para explicar cómo se produjo ese documento y qué repercusiones tuvo, les dejo un link con un reportaje que me hizo poco tiempo después Luis Gasulla [Link]
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